Estos principios activos son los denominados "de segunda línea" en la elección del tratamiento del Síndrome de Déficit de Atención e Hiperactividad (ADD, ADDH, TDA, SDA según la denominación o idioma en el cual se lo exprese) y son utilizados cuando los estimulantes del sistema nervioso no tienen el efecto deseado, presentan efectos colaterales o cuando ellos están contraindicados. Por último, en cuadros de comorbilidad con otros trastornos, es necesario jerarquizar la sintomatología que debe ser tratada de forma prioritaria o si hay que tratar a la vez todos los síntomas presentes.

 

Las alternativas a los psicoestimulantes más frecuentemente utilizadas han sido tradicionalmente algunos fármacos antidepresivos y agonistas adrenérgicos, y en los últimos años algunos neurolépticos. Otro tipo de medicamentos son usados de una manera más anecdótica. Los diferentes fármacos utilizados como alternativas en el TDAH tienen mecanismos de acción muy dispares, y no se sabe de manera precisa como mejoran los diferentes síntomas.

​Para conocer mas acerca de ellos, sus indicaciones, efectos y/o mecanismos de acción, seleccione una de las opciones detalladas mas abajo (resaltadas en azul) y podrá acceder a la información deseada.



Medicamentos que son tratamientos de establecida eficacia

 

Antidepresivos Tricíclicos

Imipramina           Amitriptilina

 

Inhibidores de la recaptación de serotonina (IRS)

Fluoxetina

 

Inhibidor  de la recaptación  de catecolaminas

Bupropion  



 

Medicamentos probablemente eficaces

Venlafaxina                Agonistas alfa 2 adrenérgicos              Clonidina

 

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Medicamentos posiblemente eficaces

Bloqueadores Beta-adrenérgicos



 

Medicamentos eficaces pero habitualmente no recomendados

Carbamazepina

Neurolépticos

Risperidona

 

Inhibidores de la monoaminooxidasa



Los antidepresivos tienen efectos fundamentalmente en los sistemas neurotransmisores de la serotonina y la noradrenalina y los neurolépticos en el sistema dopaminérgico.

 

La clonidina es básicamente un estimulante alfa-adrenérgico y los anticonvulsivantes incrementan los niveles de GABA disponibles en Sistema Nervioso Central.



La literatura reconoce el efecto positivo de algunos de ellos, mientras que otros medicamentos tienen resultados dispares conforme se estudien las diferentes fuentes de información. En la práctica diaria  los requerimos en muy pocas ocasiones  ya que con los estimulantes del sistema nervioso (cambiándolos cuando uno de ellos no resulta beneficioso) la gran mayoría de los pacientes tienen respuesta favorable.



 

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